sábado, 16 de julio de 2016


Me siento orgullosa de mí misma.
Recatada y educada, pero libre y desatada.
Toda crítica es constructiva si quien la recibe saber hacer de ella un escalón.


Me suelo hablar a solas, y por si me descubro dentro de algún tiempo,sólo quiero hacer actualizaciones de lo que soy ahora.
Tantas cosas que quisera correr a contarle a alguien más, y que me servirán en un futuro como tierra fértil que floreció y cambió.
Que los popotes me dan pavor
y me fascina buscar chícharos en el arroz.
Que ya como lentejas
pero dejé la leche de vaca.
Que sigo amando el aguacate,
y lo frecuento más que a mi abuela.
Que ya me desato más
y aventuro seguido.
Que me salieron nuevas alas,
pero quiero recorrer el mundo a pie.
Que sigo manejando,
pero ya solté un poco el control de mi vida.
Que sigo amando la salsa,
pero el folklor también me pica la vida.
Que mi abuelo se ha ido
y el perdón de mi tía no ha venido.
Que mi cabello cada vez es menos
pero la sonrisa la tengo más tupida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario